De experiencia nacional a referente técnico en Centroamérica
El Proyecto de reducción de agua no contabilizada y optimización de la eficiencia energética (RANC-EE), que lidera el Instituto Costarricense de Acueductos y Alcantarillados (AyA), ha alcanzado un grado de avance técnico y operativo que lo posiciona como referente en la región. Su éxito se sustenta en un modelo integral, financiado con recursos multilaterales, que combina renovación de infraestructura, digitalización de procesos y fortalecimiento institucional.
TYPSA lidera el consorcio Aguas de Escazú, consultor responsable del diseño e implementación técnica del proyecto desde el año 2019, realizando desde el acompañamiento estratégico hasta el desarrollo de soluciones específicas –sistemas informáticos, herramientas de monitoreo, planes de sustitución y esquemas de gestión–, de forma que ha convertido el proyecto en una experiencia exportable y una referencia para toda la región centroamericana.
Avances técnicos: digitalización, renovación y eficiencia
El proyecto ha culminado la mayoría de las contrataciones previstas para adquisición de equipos clave –micromedidores, macromedidores, caudalímetros, válvulas y registradores de datos– logrando importantes hitos en la transformación digital de AyA, incorporando un sistema de mantenimiento para estandarización de activos (GMAO), la gestión de pérdidas y detección de fugas (SCP), una herramienta geoespacial de modelado y control de redes, y un Cuadro de Mando Integral, con gestión de medidores, control de fraudes y ensayos de laboratorio.
Se han sustituido más de 275.000 micromedidores DN-15, rejuveneciendo el parque de medición y recuperando caudales no contabilizados, con impacto directo en la sostenibilidad financiera de la institución. Asimismo, se han ejecutado 34 km de tuberías, optimizado zonas críticas del Acueducto Metropolitano y reducido fugas con controladores de presión inteligente.
Intercambio regional: una plataforma para la cooperación técnica
Uno de los impactos a destacar del proyecto ha sido su conversión en plataforma de intercambio de conocimientos a nivel regional. La experiencia de Costa Rica, estructurada técnicamente por el consorcio consultor, ha despertado el interés de diversas empresas públicas de agua en Centroamérica.
La Administración Nacional de Acueductos y Alcantarillados (ANDA), de El Salvador, el pasado año envió una delegación técnica de alto nivel a Costa Rica para conocer de cerca los avances del proyecto, y, recientemente, lo ha hecho EMPAGUA, empresa municipal de agua de la Ciudad de Guatemala, interesada en los temas normativos, modelos tarifarios, implementación de medición inteligente, estrategias de financiación con bancos multilaterales y uso de herramientas tecnológicas para la detección de fraudes y optimización de redes.
El consorcio liderado por TYPSA preparó los contenidos técnicos a exponer en ambos casos, estructurando las metodologías de transferencia y adaptando los aprendizajes del RANC-EE a los intereses y realidades de las instituciones visitantes.
Conclusión: un modelo exportable liderado técnicamente por TYPSA
El proyecto RANC-EE ha dejado de ser únicamente una iniciativa nacional de mejora en la gestión del agua: hoy se puede decir que es una plataforma de referencia técnica en Centroamérica, ejemplo de cómo combinar soluciones tecnológicas, renovación de infraestructura y fortalecimiento institucional en torno a un objetivo común: la reducción del agua no contabilizada.
El papel del consorcio Aguas de Escazú, liderado por TYPSA, ha sido determinante. Su capacidad técnica para diseñar, acompañar y transferir soluciones ha permitido no solo cumplir los objetivos del proyecto, sino convertirlo en un modelo replicable a escala regional. TYPSA, como líder técnico, ha demostrado que una consultoría bien estructurada es, no solo imprescindible para la implementación, sino también generadora de valor, conocimiento y cooperación internacional.
Con este enfoque, Costa Rica fortalece su institucionalidad hídrica, AyA consolida su modernización y TYPSA reafirma su compromiso con una ingeniería al servicio de la eficiencia, la sostenibilidad y el desarrollo compartido.